El esqueleto humano está formado por
206 huesos. Al unirse, los huesos forman el esqueleto. Los músculos
se adhieren a los huesos y de este modo permiten su movimiento.
En el esqueleto humano se pueden
distinguir tres zonas o regiones principales: la cabeza, el tronco y
las extremidades superiores o inferiores.
Variedad de huesos
Los huesos se clasifican según su
forma en:
Huesos largos: tienen forma
alargada, parecen tubos con extremos redondeados. El fémur es un
hueso largo.
Huesos cortos: a lo largo y a lo
ancho estos huesos son casi iguales. Los huesos que forman la columna
vertebral se denominan vèrtebras y son huesos cortos.
Huesos planos: el espesor
de estos huesos es menor que el largo y el ancho. Los huesos que
forman el cráneo y el omòplato son huesos planos.
¿Cómo se forman los huesos?
Los huesos se convierten en órganos
duros y resistentes luego de atravesar un proceso de formación que
cumple varias etapas:
Etapa mucosa: durante el
embarazo, cuando el bebe crece dentro de cuerpo de su mama, los
huesos del bebe son blandos y tienen el aspecto de una gelatina muy
espesa.
Etapa cartilaginosa: los huesos
adquieren dureza y consistencia, pero todavía tienen una textura
blanda y plástica que es comparable con la de una goma de borrar.
Además los huesos cuentan con un cartílago de crecimiento. Este
cartílago se estira y gradualmente se convierte en hueso. De esta
manera, el hueso aumenta de longitud.
Etapa de osificación: los
huesos se endurecen totalmente. Este periodo se extiende hasta que
las personas alcanzan su crecimiento total. Se calcula que el
crecimiento óseo de una persona termina entre los 20 y 25 años
aproximadamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario